Ya no hay barrera natural, que impida por ejemplo que se encuentre microplásticos por encima de los 3.500 metros de altura, como por ejemplo en la cumbre del Monte Fuji en Japón llevados por las nubes.
Cómo ya es de todos tristemente sabido y venimos advirtiendo hace meses, a nuestros lectores de Stop Plástico, hoy en día no hay ecosistemas que no tengan algún grado de contaminación por microplásticos.
Pero una cosa es que te lo cuenten y otra que te lo demuestren, como lo acaba de hacer hace unos meses el profesor Hiroshi Okochi y 14 científicos de la Universidad Waseda de Japón.
Microplástico en las nubes sobre el monte Fuji
En una investigación liderada por el profesor Okochi pudo comprobarse que las aguas pluviales de las cumbres del Monte Fuji y del Monte Oyama, con altitudes entre los 1.300 y 3.776 metros sobre el nivel del mar, contenían microplásticos.
La investigación determinó residuos de 9 tipos de polímeros diferentes, polietileno, polipropileno, tereftalato de polietileno, polimetacrilato de metilo, poliamida 6, policarbonato, copolímero de etileno-propileno o aleación de polietileno-polipropileno, poliuretano y resina epoxi.
Una vez más salen a la luz estudios que ya no dejan duda de la gran contaminación de micro plásticos que no tienen barreras naturales para alcanzar las altas cimas, y moverse por las nubes.
Pero lo que más llamó la atención del profesor Hiroshi y su equipo, fue de que muchos de estos residuos encontrados que portaban grupos hidrófilos como carbonilo y/o hidroxilo eran abundantes, lo que sugiere que podrían haber actuado como núcleos de condensación de hielo y agua en las nubes. Por lo que pudieron determinar que los microplásticos a gran altitud influyen en la formación de las nubes, lo que significaría que podrían estar modificando el clima.
Los microplásticos a gran altitud influyen en la formación de las nubes, lo que significaría que podrían estar modificando el clima.
El estudio que fue publicado en agosto del presente año, en la revista Environmental Chemical Letters, ha causado gran preocupación en el mundo científico. Y abre las puertas para una investigación más profunda sobre cuanto podrían estar influenciando los micro plásticos en el cambio climático.
«Hasta donde sabemos, este estudio es el primero en detectar microplásticos suspendidos en el aire y que se infiltran en el agua de las nubes, tanto en la tropósfera libre como en la capa límite atmosférica», afirman en el artículo.
¿En qué consiste el estudio?
El agua de las nubes se recogió en las cumbres de las dos montañas japonesas, más emblemáticas el Monte Fuji y el Monte Oyama, en una altitud de entre los 1.300 y 1.776 metros. Entre la tropósfera y la capa límite atmosférica, ambas en la capa más baja de la atmósfera terrestre.
Los investigadores utilizaron técnicas avanzadas de imagen para determinar si había microplásticos y cuáles en las nubes sobre el Monte Fuji
Y descubrieron que las nubes contenían hasta 14 trozos de plástico por litro de agua y su tamaño oscilaba entre 7 y 95 micrómetros, un poco más ancho que un cabello humano.
Los plásticos en si son hidrófobos, esto quiere decir que repelen el agua, pero expuestos a una acción prolongada de luz ultravioleta se vuelven hidrófilos, absorben el agua. Afirma el documento científico.
Y es precisamente que ese cambio y la abundancia de estos polímeros en algunas muestras lo que les sugiere que han actuado como «núcleos de condensación» del hielo y el agua de las nubes.
Los núcleos de condensación, concentran el vapor de agua en la atmósfera, y participan en la formación de las nubes.
“Nuestros hallazgos demuestran que los micro plásticos a esas alturas influyen en la formación de las nubes y por lo tanto estarían participando en la modificación del clima. Ya que en la troposfera libre se transportan y contribuyen a la contaminación global», afirma el científico Hiroshi Okochi.
¿Cómo llegan estos microplásticos hasta las nubes?
Es una de las preguntas que nos hicimos en STOP PLASTICO y que nos respondió en un articulo anterior el Dr. en Hidrología Carlos Edo. (entrevista a Carlos Edo) “… el posible origen, que se suele pensar es el desgaste de materiales, de neumáticos, de la ropa sintética o de otros procesos industriales; pues sabemos que generan unos residuos que pueden ser llevados por el viento y llegar hasta esas localizaciones”.
Otro factor importante para la aéreo transportación de partículas plásticas, es el Oceáno. Que envía sus partículas al cielo a través del rocío marino y otros «procesos de aerosolización», en los que las partículas son transportadas por el aire. Como conclusión de esta investigación la Universidad de Waseda, publicó un comunicado en el que expone que: “ Esto implica que los microplásticos pueden haberse convertido en un componente esencial de las nubes, contaminando casi todo lo que comemos y bebemos a través de la ‘lluvia de plástico'».
Para más información descargue aquí el documento del profesor Hiroshi Okochi.